Fringe se construye tejiendo hilos de lana de colores brillantes con dos tonos diferentes de gris: un color carbón y un color humo más claro. El resultado es, a su vez, atrevido y discreto, ya que los colores primarios se fusionan en bloques monocromáticos.
Los tonos grises crudos son evidentes en el borde del diseño en una franja larga táctil, que da nombre a la alfombra. "Los colores frescos y la construcción con flecos hacen que este sea un lugar perfecto para el hogar", comenta el diseñador Daniel Costa, afincado en París.